sábado, 17 de enero de 2015

Ventajas e inconvenientes

El mundo de las tecnologías avanza a un paso vertiginoso mientras que la enseñanza intenta adaptarse poco a poco para poder motivar al alumnado desde una perspectiva mucho mas dinámica. Un reflejo de ello es la llamada Pizarra Digital , también llamada pizarra interactiva o PDI, que ayuda al profesorado a abrir una ventana a millones de posibilidades dentro del aula. Ante estos nuevos sistemas de enseñanza siempre surgen ciertas reticencias a su uso por varios motivos. En esta pagina voy a intentar resumir algunas de las dudas que me surgieron sobre las ventajas e inconvenientes de adaptar una de ellas a nuestras aulas de ELE.

La PDI puede diferenciarse en dos tipos. La primera es una pizarra sensible al tacto que funciona con la presión de un dedo o un bolígrafo y la segunda depende de un  sistema de infrarrojos y se pueden manejar con lapices electrónicos. Por precio y comodidad, la mas utilizada es la segunda ya que no tiene que depender de una pantalla especial, sino que a través de un proyector, una pantalla y un ordenador, podemos instalarla.

Para empezar, vamos a empezar con los posibles inconvenientes que se pueden presentar al utilizar un PDI. El primero sería el coste que supondría conseguir este tipo de tecnología para las aulas. He consultado precios online y entre el software, lápiz puntero y proyector no bajaríamos de los 1000€:

1.  http://www.todopdi.com/6-pizarras-digitales

2.  http://www.campuspdi.com/pizarras-digitales-smart-board-lp-15-50-marca-1/

No todos los centros pueden permitirse este tipo de tecnología, aunque a la larga es una inversión en material ya que , tanto profesorado como alumnado puede presentar y preparar actividades en formato electrónico sin necesidad de fotocopias o libros de texto (ambas partes salen ganando). Por otra parte, ya han aparecido diversas soluciones al problema, por parte de docentes e informáticos que, disponiendo de otros dispositivos, han podido crear PDI de “bajo coste”. Aquí tenemos dos ejemplos. En el primer vídeo, a través de un proyecto del Colegio Altamira (Chile), se consigue los mismos resultados con solo un programa y un puntero láser. En el segundo vídeo, el profesor Johnny Chung Lee de la Universidad Carnegie Mellon crea el mismo sistema ayudándose de un mando de la Wii:

1.    https://www.youtube.com/watch?v=5eAa_Qh-8Vc

2.    https://www.youtube.com/watch?v=-u39oBLNN-8

En el caso de que el centro pudiera permitirse una PDI, otra desventaja podría ser la instalación del sistema al aula. Una vez conseguido el software, el proyector y la pantalla, no habría grandes inconvenientes a la hora de preparar la pizarra para nuestras clases. Según los vídeos explicativos y manuales online, la PDI depende de un programa que se instala en el ordenador y una vez realizado este paso, se calibra la pantalla de manera muy sencilla. Entre los diferentes programas,aquí tenemos un vídeos explicativo de como manejar el sistema Ebeam:

https://www.youtube.com/watch?v=VvBSEWkFrXY

Aunque el proceso parece muy fácil, un posible inconveniente a la hora de la instalación del programa seria la compatibilidad con el sistema del que ordenador disponga. Según lo leído, estos programas suelen funcionar con Windows, lo que dificultaría su instalación en programas de software libre, afortunadamente, ya existen nuevas propuestas para ello. Este es el ejemplo de Open Sankore, un programa de PDI adaptado a las diferentes necesidades (MacOS 10.6 y 10.7, y Linux Debian y Ubuntu), también adaptable a sistemas privativos como Windows XP, Vista o 7.

http://open-sankore.org/en/download

Si finalmente, pese a todos estos inconvenientes (con solución) logramos por fin tener en nuestra clase la PDI, otra de las preguntas que nos tenemos que plantear es , ¿cómo utilizarla? Y no solo a cómo ponerla en practica en el aula, sino a cómo sacarle el máximo partido. A menudo los docentes confundimos las nuevas tecnologías con metodología y acabamos haciendo lo mismo que hacíamos con el libro de texto pero en diferente formato. A pesar de que, obviamente, esta opción es mucho más atractiva : imágenes,vídeos, música, páginas web, etc. al final se automatiza si somos los únicos actores de nuestras clases y dejamos a la clase como meros espectadores de nuestra lección magistral.

Si buscamos por internet podemos encontrar todo tipo de actividades lúdicas en las que hacer partícipes a nuestros estudiantes. Día a día aparecen nuevos ejercicios interactivos que nos ofrecen paginas online, en este caso para ELE, o editoriales de manuales que compaginan el formato papel con el electrónico y ofrecen actividades para preparar en clase:

http://pasaporteele.blogspot.sg/2011/03/ya-tenemos-las-actividades-interactivas.html

https://prezi.com/lti-vnys9517/actividades-ludicas-para-la-pizarra-digital-en-el-aula-de-ele/

http://eclecticedu.blogspot.sg/2011/03/actividades-con-la-pizarra-digital.html

http://www.rutaele.es/pizarra-digital-interactiva/


Según lo leído, la pizarra digital puede servir como un “tablero” central en el que diferentes alumnos puedan conectarse desde otros dispositivos. Podemos utilizarlo ,no solo para jugar si no para practicar todo tipo de destrezas. Por ejemplo, si los alumnos disponen de dispositivos con infrarrojos (móviles o tabletas) podríamos conectarlos a la PDI e interactuar varias personas a la vez en un mismo ejercicio. En este aspecto las ventajas dependen de la imaginación de profesores o alumnos que quieran innovar un poco mas en los posibles materiales de clase.

Por último, el mantenimiento de este tipo de pizarras también depende de un mantenimiento informático en caso de haber posibles problemas técnicos. Los centros suelen tener profesionales que se encargan de estos equipos, pero , en el peor de los casos, una pequeña formación básica bastaría para poner en orden posibles alteraciones en el sistema (formatear, calibrar, etc).

En resumen, las nuevas tecnologías pueden presentar nuevos interrogantes en nuestra nueva incursión al mundo interactivo en el aula, pero con un poco de preparación previa, ganas de innovar y una base de conocimientos informáticos, podemos crear nuevas vías de motivación para nuestras clases de español y conseguir una mayor implicación por parte del alumnado en su aprendizaje.